La nueva ley laboral brasileña busca formalizar el teletrabajo, aquel que se realiza para el empleado fuera del ambiente de la empresa pudiendo también ser prestado fuera del país, ante el caos de desplazarse de la residencia al trabajo (y viceversa), así como los costes de mantener una estructura para acoger al empleado en el ambiente de la empresa. Así, optaron por la posibilidad de reducir los costes y mantener el contrato de trabajo con su empleado.
El contrato de teletrabajo debe ser establecido de acuerdo con la necesidad específica de cada empleador, considerando la actividad de la empresa, el servicio a ser prestado por el empleado, si habrá o no control de jornada de trabajo, como será acordado la responsabilidad por la adquisición, mantenimiento o suministro de los equipos e infraestructura necesaria y adecuada a la prestación del teletrabajo, de las cláusulas del convenio colectivo, entre otras cuestiones que la empresa considere conveniente.
La reducción de coste con el transporte, la comida, el transporte de la empresa, uniforme, así como con el activo fijo de la empresa como mesa, silla, teléfono, ordenador, entre otros costos fijos que la empresa mantiene por tener un puesto de trabajo en su ambiente, puede ser considerable, comparado con la posibilidad de tener el empleado prestando los mismos servicios en el ambiente residencial, sin contar con el desgaste físico y mental que cada trabajador tiene sólo con desplazamiento para el trabajo.
De acuerdo con el art. 75-C de la CLT, el empleador podrá realizar la alteración entre régimen presencial y de teletrabajo, siempre que haya mutuo acuerdo entre las partes, registrado en aditivo contractual. El empleador también es responsable de instruir al empleado sobre las precauciones necesarias para evitar enfermedades y accidentes de trabajo, de acuerdo con el Art 75-E de la CLT.
Este modelo de trabajo está creciendo en Brasil. Los datos confirman que el 36% de las empresas en Brasil adoptan algún tipo de trabajo a distancia, y este número sube a más del 70%, en el estado de São Paulo, lo que puede realmente indicar una tendencia.