En el mes de abril, el Ministerio de Hacienda brasileño divulgó una nota explicativa sobre el Proyecto de Ley 863/2015, que modifica las exenciones de la nómina adoptadas desde 2011, y del que Auxadi avanzó las primeras informaciones en su newsletter de marzo.
Según el Gobierno, la renuncia fiscal del programa sumó 21.600 millones de reales en 2014 (0,39% del PIB) y en 2015 se estima que las arcas públicas dejen de ingresar 25.200 millones de reales. Con el nuevo proyecto de ley, el gobierno pretende reducir esta renuncia fiscal en 12.000 millones de reales.
► Situación actual
La Exención de la Nómina (“Desoneração da Folha de Pagamento” en portugués) surgió como medida provisional en 2011, convertida posteriormente en ley. La medida redujo el valor de la contribución patronal incidente en las nóminas de algunos sectores. La medida se introdujo dentro de una política anticíclica que buscaba mejorar la competitividad, incentivar las exportaciones (ya que la facturación procedente de las exportaciones no estaría en la base del cálculo del impuesto) y estimular el empleo.
La medida substituía la “Contribución Patronal sobre Nóminas” por una contribución (del 1% o 2%) sobre una base de cálculo compuesta por la facturación bruta y las deducciones legales de la empresa, la “Contribución Patronal sobre Facturación Bruta” o CPRB.
► Impactos en el sistema tributario brasileño
Según la nota, la medida creó distorsiones con impactos a corto, medio y largo plazo en el sistema tributario brasileño, y especialmente en la financiación de las pensiones. Entre otros, aumentó la regresividad del sistema tributario; creó una situación de impuesto en cascada al no generar créditos tributarios; distorsionó el reparto al beneficiar a las empresas con mano de obra más intensivas y tener una incidencia menor en que eran más intensivas en capital, reduciendo la inversión; y aumentó el coste administrativo del Estado y la burocracia al tener que gestionar dos sistemas diferentes.
► Proyecto de Ley 863/2015
Con el proyecto de Ley 863/2015, buscan limitar y perfeccionar la política de exención en la nómina. Como medida principal, establece el aumento de los tipos del 1% al 2,5% y del 2% al 4,5%; algo que hará que muchas empresas hoy sujetas a la exención, vuelvan al sistema tradicional de pago de la contribución patronal. El Ministerio de Hacienda aclaró que varias empresas continuarán beneficiándose de la exención, como es el caso del sector industrial, en el que el 40% de las empresas continuarán siendo beneficiadas por el programa, incluso con el aumento de los tipos.
El Proyecto se encuentra en la Cámara de los Diputados, a la espera del parecer de la Comisión de Finanzas y Tributación, y de la Comisión de Constitución y Justicia y de Ciudadanía.